Universidad de Chile pasa su mejor momento en mucho tiempo. Los azules han encadenado tres triunfos seguidos en Primera División por primera vez en 100 semanas (abril de 2015) y prendieron su ilusión de disputar el título del Torneo de Clausura.
La U derrotó a Unión Española por 2-1 este domingo y como le gusta a sus fanáticos, sufriendo hasta el final sin entregarse y doblegando la adversidad.
Pero, ¿qué cambió para que los universitarios volvieran a la senda de la victoria tras un irregular arranque? Acá algunas razones de la levantada del Romántico Viajero.
Fortaleza mental
Uno de los factores que carecía este equipo era la fortaleza mental en los momentos complicados. En el inicio del torneo, a los azules les costaba todo y al primer golpe quedaba K.O. (cómo ocurrió ante Huachipato en la tercera fecha). Pero todo cambió, ahora la U logra sostener sus momentos malos y sabe sobreponerse a ello, y el mayor ejemplo fue ayer ante Unión Española cuando le empataron en una jugada aislada y después de la expulsión de Gonzalo Jara siguió atacando hasta encontrar el agónico gol de Sebastián Ubilla.
Factor Mora
Hasta la cuarta fecha, la U sólo había marcado dos goles en el Clausura y además perdió a Gastón Fernández que se fue a Brasil. Fue cuando Ángel Guillermo Hoyos decidió el ingreso de Felipe Mora, que en las primeras fechas había sido postergado por las lesiones y el regreso de Leandro Benegas. El ex Audax explotó y anotó seis goles en los tres cotejos que los azules ganaron, siendo la pieza fundamental en este repunte y avisando que va por más.
Seguridad defensiva
Uno de los problemas que mostró la U en el inicio de la era Hoyos fueron los errores defensivos, especialmente de sus zagueros centrales Christian Vilches y Gonzalo Jara, que le costaron goles evitables. Sin embargo, en esta racha de victorias, el funcionamiento del bloque posterior ha mejorado considerablemente. Los rivales le llegan poco y le cuesta romper su cerco. Incluso, hasta los intérpretes se conjugan para eso, ya que Lorenzo Reyes -quien tomó el lugar de Jara tras ser expulsado ante Unión- elevó su nivel y rindió como central junto al Quili, incluso inició la jugada del gol del triunfo de Ubilla ante los hispanos. Además, los laterales Matías Rodríguez y Jean Beausejour también están recuperando su forma, no solo en ofensiva, también cerrando su carril.
Alza de nivel individual
Otro punto fundamental es la levantada de varios elementos en los últimos partidos. Matías Rodríguez comenzó a mostrar algunos destellos del 2011-2012, Gonzalo Jara -pese a la roja ante Unión- evidenció seguridad como en la Selección, Jean Beausejour levantó tras un pobre arranque, Gonzalo Espinoza es un todo terreno que no pierde balones y empuja al equipo, Lorenzo Reyes con confianza es un jugador de selección y demostró en los últimos compromisos por qué llegó a España, mientras que Felipe Mora está saldando su deuda con el gol tras su millonario paso desde Audax. Cuando las individualidades funcionan, el equipo crece.
Repetición de una oncena titular
El gran problema de la era Beccacece y Castañeda en la U fue la constante rotación de la oncena inicial, nunca supimos cuál era el equipo titular de la U porque en todas las jornadas habían hasta cuatro cambios. En este torneo, Hoyos ha repetido prácticamente el mismo equipo en las siete jornadas y desde la quinta jornada -tras la partida de la Gata a Gremio- sólo ha hecho una modificación por la lesión de Leandro Benegas. Un equipo que comienza a conocerse y a mecanizar sus movimientos.