El portero brasileño Bruno Fernandes fue presentado como nuevo refuerzo del Boa Sporte de Varghinas. Hasta ahí, una noticia común en cuanto a contrataciones de jugadores. Sin embargo, el caso del golero no ha dejado indiferente a nadie.
Resulta que en 2013, Fernandes fue condenado a 22 años de cárcel por el asesinato de su ex amante Eliza Samudio, sin embargo el pasado 24 de febrero su liberación, para que pueda seguir sus recursos de apelación en libertad, y de paso volver a tener una nueva oportunidad en el fútbol.
«Estoy muy feliz con esta oportunidad», dijo Bruno a la prensa, vistiendo la casaca de este club de segunda división, aún con la inscripción de uno de los patrocinadores que retiraron su apoyo.
«Me estoy preparando desde hace bastante tiempo. Pasar por lo que he pasado no ha sido fácil. Sinceramente, no me preocupa lo que la gente diga por ahí. Me concentro en mi trabajo. Lo importante para mí es volver a empezar», agregó.
El nuevo club de Fernandes se ha ganado el rechazo de sus patrocinadores quienes rescindieron sus contratos tras el anuncio de fichar al golero.
«El Boa reitera que su postura es a favor de la reintegración social y de que el arquero Bruno merece una nueva oportunidad como profesional”, publicó el club a través de sus redes sociales.