Por Diego Espinoza Chacoff
El 30 de diciembre del 2011 fue el día en que el ex delantero de la Universidad de Chile, Diego Rivarola, anunció su retiro del fútbol profesional. Inmediatamente después de eso, desde Azul Azul le pidieron al ex goleador de los laicos que se desempeñara como el asesor deportivo de la U, un cargo que aceptó de inmediato.
Pese a eso, y cinco años después del ofrecimiento, el ex futbolista argentino-chileno decidió hacer un cambio en sus funciones dentro de la institución universitaria y fue transferido desde la parte técnica al área comercial de la concesionaria que dirige a la U.
Una determinación tomada en un consenso entre el propio ex jugador y la dirigencia azul, quienes le entregarán responsabilidades de marketing a Rivarola, convirtiéndolo en la cara visible del club, aunque más alejado de las decisiones del plantel en sí.
Paralelo a sus nuevas funciones comerciales -que aún no tiene un cargo específico definido- el otrora 7 de los azules también tendrá como misión involucrarse en el área de captación de jóvenes talentos para la U, posición que podría incluir viajes a las distintas escuelas básicas de fútbol que tiene el club a través de Chile.
Debido a la figura preponderante que tenía Rivarola como ex futbolista de los azules, cada técnico que arribó a la U -desde Darío Franco a Ángel Guillermo Hoyos- se presentó con Gokú y le habló de su proyecto futbolístico para el equipo laico. Hoy, eso si, Gokú se aleja un poco de las canchas y se abocará a sus nuevas funciones en el club durante 2017.
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