ATON Chile / El Gráfico Chile
Un final poco grato tuvo el partido entre O’Higgins y San Luis en el estadio El Teniente de Rancagua, donde los celestes se impusieron por un sufrido 4-3 y alcanzaron la punta del Torneo de Clausura.
¿El motivo? Una vez terminado el compromiso, varios jugadores del conjunto canario fueron a encarar al volante de los dueños de casa, Ramón Fernández. Tras eso se armó una pelea en el túnel que culminó con el delantero de los quillotanos, Jaime Grondona, detenido por una eventual agresión a un guardia de seguridad.
Frente a esta situación, el mediocamista argentino explicó lo que generó la gresca. «Cuando uno pierde se calienta, pero hay que bancársela. Yo cuando perdí, me la banqué, 8-1 perdí (ante la U), me la banqué, no salí a hablar con nadie», reconoció el trasandino en declaraciones que reproduce radio Cooperativa.
«Hoy (ayer) gané y estoy feliz. Creo que se enojaron por el taco que tiré en la raya, pero es mi manera de jugar, todos lo saben. Hay que explicarles eso o que se pongan a ver los partidos», añadió.
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