Por Pablo Serey Correa
Los soñadores no tienen edad y bien lo sabe Ricardo Lunari, ídolo de la Universidad Católica de la década del 90 que no se hace problema en hacer público su gran anhelo: convertirse en el DT de la Franja. A sus 46 años, quien fuera campeón con la UC en el Apertura 1997 está decidido a encaminar su rumbo hacia San Carlos de Apoquindo, pero sabe que el trayecto no ha sido ni será fácil.
De paso por Chile con la buena excusa del encuentro eliminatorio entre la Roja y Argentina, el oriundo de San José de la Esquina aprovechó de conversar largo y tendido con El Gráfico Chile sobre su gran sueño y de diversos aspectos que tienen firme vinculación con ello: sus desencuentros con la dirigencia de Cruzados, sus críticas a la gestión institucional y deportiva de Católica, su impresión de Mario Salas y José María Buljubasich, entre otros tópicos, fueron abordados con distensión y sin tapujos por el protagonista de esta entrevista.
Del presente en cancha de la UC hasta sus reales opciones de volver a Chile como entrenador transita este diálogo con un Lunari que busca una nueva oportunidad para dirigir junto a sus escuderos Sergio Stacciotti (ayudante) y Emanuel Lillini (PF), tras su salida de Millonarios de Colombia en agosto de 2015.
Partamos por lo deportivo ¿Qué le pasa a esta Católica que no puede lograr un título?
El problema que tiene Católica no pasa por el entrenador ni por cómo juega, Católica tiene un problema muy grave que es no poder superar esa cercanía con la punta, de los últimos dos o tres años los cinco o seis partidos que Católica tenía que ganar no los pudo ganar, eso va más allá del técnico, pareciera que hay un problema en la cabeza de los jugadores, que se bloquean en esos partidos tan importantes. Es una lástima porque hay buenos jugadores, han hecho muy buenas campañas, pero hay una barrera que estos grupos de los últimos años no pudieron cruzar.
En tu época pasó algo similar, pero pudieron quebrar la mala racha el 97 ¿Cómo se repusieron a los fracasos?
A nosotros en el 97 nos pasó algo parecido, llegamos ahí el 94, 95, 96 y al final en el 97 rompimos ese mito, a este grupo le falta eso, convencerse de que lo pueden lograr. Ese año nos juramentamos que era el momento, que no podíamos dejar pasar la oportunidad: pasó la del 94 en la que hubo algunas cosas raras alrededor de los últimos partidos, con la U, los penales, la expulsión de Gorosito en el clásico; en el 95 pasó algo parecido y en el 96 Colo Colo sacó mucha ventaja. Pero en el 97 era decir ya basta, desaprovechamos una, dos, esa era la vencida, se juntó gente con mucha experiencia y nos ayudó mucho gente que estaba del otro lado, como Javier Margas o Jaime Pizarro, jugadores que estaban acostumbrados a ser campeones, ellos nos inyectaron un poco de esa mística ganadora que traían.
¿Y qué le falta a la actual Católica para romper el mito del que hablas?
En este momento si uno se pregunta qué le puede faltar a esta Católica, para mí le falta el temperamento que se lo podrían dar tres o cuatro jugadores de jerarquía y experiencia, me parece que ahí están la clave, porque en el momento que tienen que aparecer los hombres, Católica tiene buenos muchachos y esos muchachos todavía le faltan pasos, consolidación, mantener durante un tiempo un buen nivel, porque llegar no es tan difícil como permanecer. A Católica en este momento le está faltando esa clase de jugadores, esos que digan que vamos a empujar a los jóvenes a lograrlo. Se apostó por un plantel extremadamente joven, talentoso, pero extremadamente joven y que le falta ese equilibrio que necesita todo plantel. Hay fallas en la confección del plantel.
¿Faltan referentes?
En Católica claramente falta experiencia, los jóvenes hacen lo que pueden. La experiencia no se la podemos exigir a Nico Castillo por más que venga de afuera, porque es un muchacho joven. Toselli si bien tiene años jugando sigue siendo joven. A lo mejor Cristián Álvarez puede lograr ser referente, pero prácticamente no está jugando, entonces me parece que eso le está faltando a Católica, tres o cuatro referentes que sepan golpear la mesa en el momento necesario, porque los chicos a veces están desorientados. Si tuvieran esos tres o cuatro grandotes que los supieran manejar, Católica está para ser campeón en casi todos los torneos. Ahí se está dando ventaja, lo que no significa que no pueda ser campeón con estos chicos, pero da ventaja en cuanto a eso. En un clásico, en un partido importante los grandes se saben manejar, saben manejar al árbitro, saben manejar los ambientes, saben asustar a los chicos, pero la Católica hoy no los tiene.
Pero eso pasa porque las sociedades anónimas tienden a apostar por jóvenes exportables en desmedro de experimentados caros que después no se pueden vender…
Es que si los clubes pensaran que si son campeones se les valorizan todos los jugadores, apostarían. Lo que falta, no solamente a la Católica, lo digo en general, es invertir más, porque poner plata se toma como una pérdida, pero en el fondo es una inversión para tener una ganancia mayor, porque si Jeisson Vargas vale un millón de dólares, si sale campeón pasa a valer dos o tres, pero eso es lo que ellos no entienden, parece que les cuesta entender que hay que invertir, me parece que en el último tiempo Católica se ha quedado corta en cuanto a inversiones.
Con eso entramos de lleno al tema dirigencial. En reiteradas ocasiones has hecho un llamado a la autocrítica por parte de Cruzados…
El tema de la autocrítica es algo que vengo escuchando mucho en la gente de Católica, sobre todo en los hinchas, yo escucho más a los hinchas que a la dirigencia, la dirigencia uno la nota desaparecida, no da declaraciones, uno no sabe si están contentos o tristes. A mi me dolió mucho la derrota con Colo Colo porque era un partido que había que ganarlo, pero se perdió y todo el mundo salió a decir que estaba todo perfecto, una falta total de autocrítica, no está perfecto, estamos dándole el campeonato en la mano a uno de nuestros principales rivales, todo el mundo esperaba una autocrítica, un golpe sobre la mesa, un basta, pero no, todos diciendo que tenemos lo mejor, que se hizo lo mejor, etcétera.
Y en tu época como jugador ¿había autocrítica por parte de los dirigentes?
Más que autocrítica, cuando las cosas no salían o andábamos mal, nos llamaba el chico (Alfonso) Swett, nos metía a su oficina para que le diéramos explicaciones y uno salía asustado de esas reuniones, porque el no titubeaba, el que no rendía se tenia que ir. En este momento yo no sé si se toma de esa manera, yo veo que todo se toma muy light, «perdimos, el próximo se ganará», pero mientras la gente sigue enojada. Hay que decir basta, hay que ganar el campeonato, como sea, no que nos den más explicaciones, lo único que necesitamos es ganar un campeonato.
¿Falta un rol más activo de los dirigentes entonces?
Si están bien determinados los roles y hay un gerente deportivo, los dirigentes no se tienen que meter más allá en la parte deportiva, pero me parece que hay cuestiones que no están funcionando del todo bien, hay elecciones que no se han hecho del todo bien y eso repercute en el resultado deportivo.
¿Qué te parece el trabajo del gerente deportivo José María Buljubasich?
Yo creo que lo que ha hecho Buljubasich está a la vista de todo el mundo, entonces yo no soy quien para juzgarlo, es un ex colega y son los dirigentes lo siguen confirmando continuamente es porque estarán conformes, pero yo on soy quién para juzgar la labor que está desarrollando, porque no sé cual es la función de un director deportivo.
¿Y el trabajo del DT Mario Salas?
Por lo que sé, trabaja mucho, es buena persona, me han hablado ex compañeros de él, por eso seguiría posando un par de fichaw por él, porque siempre estuvo cerca, entonces quizá le falta el último golpe, pero te digo todo esto sin el ánimo de que lo echen, ojalá sea campeón. Por mi si no pasa nada pronto, tengo todavía 20 años más para aspirar a ser técnico de Católica, entonces no estoy haciendo una campaña para sacarlo, de verad espero que sea campeón.
En otro tema en que te has manifestado crítico es en la falta de participación de la gente en Católica ¿Cómo ves ese asunto en la actualidad?
La gente requiere y necesita participar, pero acá no hay ninguna posibilidad que se le escuche, nunca ninguna iniciativa de nadie que haya hecho desde la hinchada fue escuchada. El club se maneja de forma autista, sin escuchar a la gente y no solamente a los hinchas, ex jugadores, ex dirigentes, gente muy valiosa que podría cooperar con el club, pero si no te llaman y te marginan, uno tampoco va a venir y decirles por favor me pueden escuchar.
¿Sientes que hay una deuda con los históricos?
Los históricos hay tres o cuatro trabajando en las menores y listo, ya está. Yo me fue el año 98 y creo que no me llamaron nunca, me invitaron dos o tres veces a los aniversarios del club que para mí es una alegría enorme, pero más allá de eso jamás me incluyeron en algo. Yo hace siete u ocho años que escuché promesas tras hablar con mucha gente de Católica, presenté proyectos y lo peor es que me decían que sí, que en cualquier momento me iban a dar la oportunidad, que esperara, que nunca se abría el cupo que buscaba en las inferiores. Ahora que ya dirigí en Primera y que estoy haciendo otro tipo de carrera ya no me interesa dirigir las inferiores de Católica, pero estuve 6 o 7 años esperando y veía cuando se hacía el cupo aparecía un ex jugador de Católica más joven y se lo daban a él, entonces estuve todo ese tiempo siendo un caballero con ellos, pero uno ya se cansa, ya no necesito que me den trabajo, no le debo nada a esta gente, no voy a seguir aguantando callado como si tuviera 20 años, ya tengo 46 y más de 8 como entrenador. No me sirvió callarme, no me sirvió serle totalmente funcional a la directiva Católica desde hace 7 u 8 años, ahora opino con lo que siento, sin ningún tipo de problema ni tapujos.
¿Te decían algo durante todo ese tiempo?
Lo que siempre me pedían era experiencia, sin embargo dentro del club hay gente que llegó a trabajar con menos experiencia que yo y eso siempre fue algo que me molestó mucho, porque hay una persona dentro de Católica, muy importante dentro de la estructura del club, que le dijo a mi representante que yo no tenía el perfil para dirigir la Católica y eso es la peor ofensa que se me pueda hacer. Que digan que me falta experiencia, perfecto, que no les gusta como entreno, perfecto, pero que no me digan que no tengo el perfil para dirigir la Católica, eso no ¿Qué quiere la gente de Católica? La gente quiere un equipo protagonista, que salga a ganar en todas las canchas, uno no puede dirigir la Católica, hacer un gol y meter al equipo atrás, la historia y la gente te empuja a ir adelante. Y si alguien de esta gente que trabaja en Católica se toma el tiempo de seguir mi trayectoria, sabrá que tengo el perfil, que no me elijan es otra cosa.
Pero más allá de esos momentos amargos ¿se mantiene firme el sueño de dirigir Católica?
Sí, porque la Católica no es esta dirigencia, no es este gerente, la Católica es la hinchada, es su gente ¿quién me va a decir alguna vez en la vida que yo no soy cruzado o que no estoy totalmente identificado con la Católica? Por la Católica he perdido hasta trabajos, porque en la época buena me llamó tanto gente de Colo Colo como de la U y siempre recibieron el mismo mensaje, jamás, ni ahora ni nunca, haga lo que me haga Católica, yo jamás podría trabajar ni en Colo Colo ni en la U.
Pero para cumplir ese sueño ¿crees que debes acercarte dirigiendo otro club en Chile?
Acá en Chile me está faltando dirigir en Primera, quiero una oportunidad y no desaprovecharla, me la dio Millonarios donde jugué sólo 5 meses y en Católica donde jugué 5 años no me dieron ni la Sub 13. Chile es un desafío, sé que si me salen las cosas después la Católica está ahí, a un paso, pero si hago mal las cosas se termina mi carrera en Chile.
¿Han habido acercamientos para regresar a nuestro país?
Han habido acercamientos, hay y esperemos que haya más en el futuro. Esperemos que se pueda concretar, porque estuvimos cerca de dos o tres prácticamente casi cerrados, pero no se pudo dar. Hubo dos de Primera y uno de la B, que no viene al caso nombrarlos porque están con sus entrenadores, pero ahora estamos cerca de algo y ojalá sea a partir de junio.
GRAF/PS