Cada día es más común ver a grupos de amigos tomándose fotos cada vez que se reúnen. El único objetivo es salir bien. Y aunque ésta parece ser una tarea simple, lo cierto es que no todos quedan felices con la primera toma. Muchas veces la foto se repite una y otra vez. Sobre todo las selfie.
Esta situación forma parte de los cientos de hábitos que tienen los chilenos al usar la cámara frontal de sus smartphones. Prácticas que la consultora Fieldwork y Samsung Electronics Chile decidieron investigar. El estudio analizó un universo de 858 personas, entre 18 y 50 años.
Fanáticos de las fotos
Uno de los resultados del estudio indicó que un 84% de las personas entre 18 y 50 años comparte fotos frontales en redes sociales.
Muchos piensan que este tipo de fotografías están asociadas a personas narcisistas o que buscan permanentemente atención.
Lo cierto es que al momento de tomarse una foto frontal, la mayoría confesó que prefiere hacerlo en grupo o acompañado por otra persona. ¿Cuántos? Un 44% del universo.
Entre los escenarios descritos como favoritos para inmortalizar se encuentran los viajes (67%), las celebraciones familiares (61%) y las fiestas (50%). Por lo general utilizamos las redes sociales para compartir nuestros momentos de felicidad. De hecho, un 60% señaló que prefiere ver fotos que demuestren estados de ánimo.
Compartir historias en redes sociales
La gran mayoría de las fotos que tomamos van a parar a un solo lugar: las redes sociales.
Por eso, no es de sorprender que el 89% de los encuestados usualmente suba de una a tres fotos frontales a la semana.
Lo que realmente llama la atención es un hecho que hasta ahora muchos preferían omitir: para poder publicar apenas una, la mayoría (79%) toma hasta cinco fotos antes de subir la principal.
Naturales v/s retocadas
En cuanto al tipo de imágenes, todos los días vemos cómo existe una marcada diferencia entre las fotos más naturales, sin filtros, y las fotos editadas. A la hora de elegir, el 60% de los encuestados prefiere compartir fotos sin intervenir.
Además el 83% de las personas señaló preferir también ver fotos de otros que sean más reales. Y aunque en eso hay consenso en términos generales, existe una importante diferencia entre hombres y mujeres.
Mientras ellos optan por tomar fotos frontales más naturales (70%), las mujeres prefieren retocarlas con alguna aplicación (51%).
En este aspecto también hay diferencias generacionales. El 68% de los adultos entre 31 y 50 años privilegian también las fotos menos retocadas en comparación con los jóvenes de entre 18 y 30 años. En el segundo grupo, la preferencia por las fotografías sin ningún tipo de intervención cae a un 49%.
La cámara para selfies
La tendencia de las fotos frontales se ha convertido en un fenómeno mundial, por lo que la tecnología de los smartphones ha ido adaptándose cada vez más a la necesidad de los usuarios de tomar más y mejores fotos en todo momento y lugar.
Desde hace sólo un par de años muchas marcas han ido optimizando sus equipos para esto. Han aumentado la calidad de la cámara frontal, han aumentado su pixelaje y en otros casos han incluido incluso una doble cámara para lograr efectos de profundidad.