El próximo 13 de julio Donald Trump visitará el Reino Unido. Como era de esperar, la noticia que no ha dejado a nadie indiferente, ni siquiera en el ámbito musical.
Así lo demostró Roger Waters – uno de los fundadores de Pink Floyd-, quien anteriormente ya se había mostrado en contra de las políticas implementadas por el mandatario estadounidense.
En su paso por Londres, el músico aprovechó para llenar su show de símbolos y consignas anti-Trump. La «osada» intervención incluyó como protagonista la proyección de un cartel de aproximadamente 20 metros de largo que consignaba “Trump es un cerdo”.
Es más, también aprovechó para “corromper” al chancho volador -ícono de Pink Floyd- característico en sus presentaciones en vivo. El animal inflable tenía escrito “Mantente humano o muere”, haciendo alusión directa al líder de Estados Unidos.
Así, entre proyecciones y caricaturas del magnate, la multitud recibió un mensaje cargado de crítica; Trump representado como un miembro del Ku-Klux-Klan, Trump sosteniendo un arma, Trump vomitando con la palabra “charade” (farsa) escrita en su cara, entre otros.
Si bien hubieron espectadores que criticaron la actitud de Waters, la gran mayoría del público asistente apoyó la manifestación, sobretodo considerando la inminente visita del mandatario a la capital británica.
Al estilo escocés
Pero esta no es la única vez que el ex bajista de Pink floyd arremete contra Donald Trump en el último tiempo.
El pasado 30 de junio, durante su presentación en Glasgow, Escocia, proyectó un cartel con la frase “Trump is a bawbag”, término que en aquel lado del mundo significa”escroto”.
Ahora, queda esperar si el próximo 14 de noviembre hará lo propio en su paso por Chile en el marco de su gira «US + Them».