“Hay números internacionales y por qué no, si es el huaso de hoy el que convoca a los distintos artistas que escucha… porque el huaso actual escucha a Residente, anda en camioneta y paga en línea. Ya no es solo esa figura que escuchaba únicamente cuecas o andaba solo a caballo. Por eso, a Olmue invita a artistas de todas partes y decora este certamen con una competencia folclórica de gran nivel”.
Con esas palabras Leo Caprile le “respondió” a quienes han criticado la inclusión de artistas de distintos géneros musicales a la parrilla del Festival del Huaso, evento que anoche abrió a tablero vuelto su edición 49 con la actuación de ex Calle 13 y cerró con una gran fiesta a cargo del grupo Moral Distraida.
Caprile, quien ha conducido el certamen en nueve oportunidades, ha visto en “primera fila” la evolución que ha tenido un evento que durante los últimos años se abrió a nuevos sonidos, sin echar al olvido el folclor, y actualmente se plantea como un espectáculo de talla internacional que agota entradas y alcanza altos niveles de sintonía.
“La transmisión y producción que hace TVN del espectáculo ha sido clave en el crecimiento de este festival que se ha internacionalizado, ya que llega a más de 20 países, exudando chilenidad sobre todo en su competencia”, afirma el animador.
Karen Doggenweiler concuerda con sus palabras y celebra que “este sea un escenario que pueda invitar a todo tipo de artistas”, y destaca la oportunidad que se le da no solo a artistas consagrados, sino que también a muchos músicos chilenos emergentes, como ocurrió anoche con Camila Gallardo.
“Siento que con todas estas cosas hemos avanzado hasta transformar a este festival en uno de los más queridos por los chilenos, y eso nos hace sentir orgullosos”, añade.
Ambos animadores resaltaron el que, a pesar de su evolución y apertura, la competencia folclórica siga manteniendo un “rol central en el show” y sea muy valorada por el público, algo que no ocurre en otros certámenes.
“En este festival la gente no se para al baño en ese momento (la hora de la competencia), sino que está atenta a ella y se manifiesta por su favorito”, comenta Leo Caprile, recordando la enorme “pifiadera” que hubo el año pasado luego que Familia Bombo Trío, que era favorita en El Patagual, no llegara a la final.
En esta edición, más de 200 canciones postularon a uno de los ocho cupos para entrar en la carrera por el Guitarpín de Oro, algo que a juicio de Karen Doggenweiler “demuestra que los compositores creen en este certamen porque saben que acá el folclore se toma en serio”.