Desde que se anunció su participación en el Festival de Viña del Mar, Maluma se ganó el estatus de uno de los favoritos de la parrilla de artistas que se darán cita en el certamen. Y esta noche, en su arribo, confirmó además que goza de una popularidad arrolladora.
Ocurre que desde tempranas horas decenas de jóvenes se apostaron en las afueras de la casa en que el colombiano se hospedará durante toda la semana para verlo en su primer arribo a la Ciudad Jardín. Tanta espera valió la pena, pues pasada la medianoche la voz de «Chantaje» llegó a la vivienda ubicada en Reñaca a bordo de una camioneta oficial del evento musical y tras algunos minutos salió a saludar a sus fanáticos, desatando la histeria.
El artista compartió con su gente a través de la reja de la casa por sólo unos minutos y conversó en directo con «Maldita Moda» de CHV, y aquello fue más que suficiente para demostrar que es uno de los astros de Viña 2017.